El rey dios Shem-an-na o Shemanná

 

Son varios los meses que no escribo más para el blog.

Pero eso no significa que me haya hecho el indolente o esté reposando en mi catre bolivariano

sólo que he variado mi rendimiento y creatividad y me he dedicado a las pinturas filosóficas

donde mezclo mi arte mexicano e hindú con palabras en griego y celtíbero que rescato de Moisés

y puedo darle más fuerza y vigor a la creación surrealista y futurista que tanto necesita de rosas

que nunca se aleja mucho de lo paleógeno y neógeno que vieron nacer las primeras rosas

porque para mí lo arcaico y prehistórico se liga y entrecruza con lo moderno y postmoderno

no veo tantísimas diferencias entre lo superdistante y lo supercercano

lo macrocósmico y lo microcósmico que a fin de cuentas se reflejan en nuestros dos cerebros dos ojos

dos oídos dos fosas nasales dos maxilares dos pulmones dos bronquios dos manos dos pies una cabeza

ya que los Grandes Progenitores Cósmicos nos hicieron sobre la base de un rectángulo de oro diáfano

que como bien saben quienes me leen atentamente se basa en la secuencia genial de Fibonacci

que adorna y completa mi obra literaria y filosófica hermanada con las de Platón y Aristóteles.

Por eso justamente soy de la opinión que los Grandes Maestros y sus sólidas compañeras platónicas

vírgenes después de todo por su pureza y amor maternal propulsado por sus senos frontales

no se meten en nuestros eones y ciclos para jugar solamente pico pico o a escondidas

ya que desde sus pupitres de madera lisa y púlpitos finos de cedro y caoba nos profesan y enseñan

que los humanos deben aprender a ver más allá de las diferencias y enfocarse en las esencias

y convergencias: lo que une a las personas pesa mucho más que que lo que los desune

a fin de cuentas los contrastes los contrarios los polos opuestos los extremos sirven más que nada

para resaltar y desarrollar lo que se destaca por su singularidad y particularidad

y no para rebajar ningún valor de su especifidad y originalidad ya que Dios no desdeña nada

al contrario lo ama y realza todo pues cada cosa o elemento es materia viva y debe admirarse

cada objeto tiene su carga vibratoria que sirve para alimentar cada acto y ápice de justa creación

y por eso humillar y herir es una salvajada que debe remediarse con compasión y civismo inteligente.

Tarde o temprano quien maltrata lo reprueban el fuego y la tierra la misma agua y el aire como el éter.

No estamos muy lejos de comenzar un nuevo ciclo de cultura que nos pondrá del otro de la barrera.

Estamos siendo presionados e impelidos para que demos el Gran Salto y toquemos la pandereta.

Vendrá la hora del rey dios Shem-an-na o Shemanná que nos resucitará las neuronas que fallaron

si logramos poner nuestro granito de oro blanco monoatómico en la cesta con frutas paradisíacas

nos damos la vuelta y brincamos por encima de pantanos y arenas movedizas malolientes

para que no nos puedan atrapar los licántropos y las vampiresas al son de Drácula lejos de Hulk

podamos sortear cualquier maleficio que nos quieran lanzar paleros desgraciados y paleras inmundas

y vivamos en paz y armonía como Dios manda cada vez que baja de su helicóptero y nos libera

de las cárceles en Grecia y Nigeria adonde puede llegar la peste del ébola y la malaria o la rabia.

Pido por consiguiente a Arcángeles del Buen Proceder que le abran los cogotes a dictadores y tiranos

para que fluyan de sus cerebros desgastados leche de la Virgen y oro sin pupilas sucias o turbias.

Si esto se cumpliere hasta ellos subirán a los Cielos junto con el rey dios Shem-an-na o Shemanná

porque debe saberse finalmente que el Plan Maestro de la Divinidad no tiene parangón.

No es una obra miserable o mezquina egoísta recalcitrante inflexible vengativa y aberrante

que parece haber sido ingeniada por mentes enfermas y desquiciadas como suelen ser los capítulos

de demasiadas ideologías religiones sectas y escuelas esotéricas a lo largo y ancho del planisferio.

Dice bien el Libro de K: somos puro polvo y gozo. Y con esto doy por acabado este poema extraído de las arcas de la Santa Alianza que traerá a la Tierra un nuevo orden astral que la sacará de casillas mas la incentivará a abrir un período muy distinto que la pondrá cerca del centro del sistema solar.

 
El rey dios Shem-an-na o Shemanná de los mil y un milagros y ascensos. Obra del Autor. Caracas. 2014.

Caracas 3-5 de octubre de 2014