El presente escrito y entrada completa la entrada anterior. Cito textualmente:
"El ciclo ortocuántico es un 'ciclo religioso de vida astral completa'. Lo basé en la pareja Osiris-Isis, en el famoso mito y lección de sabiduría cósmica que narra la vida, muerte y resurrección-reconexión de Osiris mediante la magia teúrgica, erótica y prânika de Isis que produjo al niño dios Horus. La clave yace en la raíz 41 (41x1.000): cable enchufado al toma corriente. En ambos cálculos se incorpora y energiza la energía termonuclear de la Kundalinî para que perdure más allá de la muerte y el mundo profano y vaya en contra de los designios del Mal que aboga por la esterilidad, la sequía y el atraso. El miembro viril de Osiris no es otro que el eje norte-sur del planeta, torcido, caído, no disparando como debería estarlo. En vista de lo cual hay que llamar a Isis-María. Eso mismo le debe suceder al inclinado y 'anciano' eje. Hasta que esa verga no se eche unos cuantos polvos el planeta será una entidad subdesarrollada, mediocre y fláccida", que no puede superar los traumas vividos desde la Protohistoria y no puede contactar los paraísos celestes de donde alguna vez vino.
Las dos ilustraciones al principio de este trabajo donde aparece muy engrandecido el miembro viril o pene (del latín, penis, o «cola», pero también y sobre todo del árbol pino, en latín, Pinus, de la familia Pinaceae y la subfamilia Pinoideae, una vasta familia de coníferas de la división Pinophyta, un árbol consagrado a Deméter y Cibeles, siendo sus semillas, piñas o piñones, del género Pinus pinea, muy atesoradas por varias razones) del Alto Iniciado y Monarca Osiris es simbólico y debe interpretarse de diversos modos: en una, su gran pene parece electrónico y fotónico, describe un tremendo generador y superacelerador de partículas, de hadrones y otras, en forma de pirámide, dentro. Sobre la glande y el orificio de la uretra coloqué un efecto luminoso o destello en verde búdico. En la otra, la paloma es un cuarzo de roca o cristal de cuarzo: efectivamente pienso que la regeneración vital del planeta vendrá por los cristales y las ondas lumínicas de altísima velocidad (exaelectronvoltios), hoy inimaginables, encargadas de redireccionar genialmente los efluvios y emanaciones telúrico-cósmicas y conectarnos al instante con el espectro de frecuencias radioastronómicas, electromagnéticas y simbólicas, significadas por jeroglíficos egipcios mayormente dorados y radiantes. Nada es por azar. Como siempre, quiero ser preciso, esotérico, objetivo y científico, llevándolo al plano universal. Esto dice Wikipedia del cuarzo:
"Otra característica interesante de un cristal de cuarzo es su capacidad de presentar un comportamiento resonante. De la misma manera que un péndulo o un columpio oscila con una frecuencia propia si, tras darle impulso, se le deja moverse libremente, un cristal de cuarzo sometido a un estímulo eléctrico puede continuar vibrando a una cierta frecuencia (dependiente de la propia naturaleza del cristal), hasta perder ese impulso inicial. Si se mantiene el estímulo de manera periódica y sincronizada, tendremos una señal a una frecuencia extraordinariamente precisa, en lo que podría considerarse la contrapartida electrónica de un reloj de péndulo. Esta aplicación es común en todo tipo de sistemas electrónicos como relojes, microprocesadores, y osciladores.
"La termoluminiscencia es la capacidad de emitir luz cuando es calentado. Los rayos cósmicos procedentes del espacio producen cambios en la estructura cristalina del cuarzo que se acumulan con el tiempo. Cuando se calienta el cuarzo, la estructura vuelve a la normalidad, emitiendo luz. Cuanto más tiempo ha sido radiado, más luz emite el cuarzo. Al medir las longitudes de onda, y compararlas con elementos ya datados, se puede obtener el tiempo que ha estado expuesto a la intemperie. La técnica arqueológica de fechar cuarzo se le denomina datación por termoluminiscencia."
Si el miembro viril de Osiris es un gran cuarzo blanco y transparente que por su posición bastante vertical o erecta sobresale cual misil, así deberá quedar vibratoriamente el eje norte-sur del cuerpo planetario cuando nuestro Sol lo excite y determine con sus explosiones o llamaradas y se acerque más al Polo Norte y Polo Sur Celestes o Galácticos, perpendiculares al Centro de nuestra Galaxia Vía Láctea, debido a los cambios que se generarán. Ahora bien, para entender a cabalidad lo de la nueva realidad y perspectiva del falo cosmográfico de Osiris hay que saber que si su miembro viril tendrá una erección, una muy particular y mesiánica, religiosa, católica y apostólica, es porque algo de afuera “tirará” de él con mucha fuerza y energía. Su falo será atraído y éste gravitará hacia la fuerza que lo está “halando” quién sabe sino Dios desde qué remota o cercana zona de la bóveda celeste. Eso es exactamente lo que quiero dar a entender cuando me refiero a una nueva perspectiva que se tendrá del grandioso falo osiríaco. Asimismo, estoy persuadido que esta atracción celestial es un estímulo en cadena, en línea, directa, que conectará a la Tierra con las entrañas del Universo. El estímulo de afuera podría venir del Gran Atractor en las inmediaciones de Virgo, pero también de varios supercúmulos, entre los cuales están el Local, los de Shapley, Corona Borealis, Virgo, Centaurus, Hydra, Norma, Boötes, Pavo-Indus, Leo, Perseus-Pisces, Horologium, Ophiuchus, por nombrar algunos, como también de hipercúmulos aún no descubiertos, más lejanos y enormes. Veo pues un multiorgasmo celebrándose, repicando y resonando, poniendo a valer inmensas vastedades en el cielo y sé que el nuevo eje y corazón del planeta deberá resonar muy bien a nivel eléctrico y magnético para subir la frecuencia y poder sintonizar a la gran Orquesta Filarmónica de los Universos ligada con ciertos puntos estratégicos como son, primero que nada, nuestro Sol Helios y después el resto del anfiteatro cósmico: por ejemplo, el Centro de la Vía Láctea, el Grupo Local, la Nube del Supercúmulo de Virgo-Coma en plena Gran Nebulosa “Araña” y la Aguja Magnética de los Cielos o Ápex Solar en Hércules. Todo esto es muy importante porque el campo magnético de la Tierra será atraído por los Polos Galácticos en Coma Berenices y Sculptor y la medianía de Ophiuchus. Nuestro Sol Helios se alineará y contactará con el Gran Reactor Multidimensional de Vida Divina en la Vía Láctea con lo que habrá buena leche, queso, mantequilla, nata y yogurt salidas de las ubres de la vaca lechera pleyadiana y se podrá establecer una nueva Cruz de Vida Planetaria unida a la Incandescente Cruz Paté Intergaláctica de los Arkángeles (ver abajo). Todo esto nos conduce a un nuevo Año 0 Cosmológico, un nuevo Punto Cero y Concha, que da lugar a la Era del Proboscidio o de Dumbo-Babar que, según mis cómputos, arrancó en mayo del 2000 y durará un total de 60 millones de años. La novedad de tal cosa no se verá de inmediato. A medida que pase el tiempo se notarán más sus alcances y sin duda alguna la vida en nuestro planeta y el sistema solar mejorarán porque más bajo en la escala de la evolución no podíamos caer. Calculo que este proceso complejo y multifacético ideado fuera de la Galaxia por activísimas, inteligentísimas, rapidísimas, centelleantes, compasivas, universales y potentísimas supermentes tomará varias centurias de las de ahora para que cuaje. Los agrogramas ingleses nos están mandando señales e indicaciones. ¡Aleluya, pues! En los 5 cuadros que siguen (págs. 5-9) ilustro las grandes razones y los pasos planetarios y cósmicos ya en camino e intento satisfacer inquietudes y desazones.
En el fantástico mito la erección, eyaculación, sembradío y enlaces iónicos de Osiris (vuelto cadáver temporalmente hasta ser liberado y reintegrado) tienen lugar a causa de una fuerza sobrehumana, colosal, avasalladora y cautivadora que sacó de su pesado sueño a su energía Kundalinî e hizo posible que a través de una operación taumatúrgica y hierofánica, sutilmente obrada por su sincera y amada media naranja Isis, ésta fuera fecundada en una especie de simulación a larga distancia, in vitro, por su marido muerto y resucitado, en estado semicataléptico, pero suficientemente alerta todavía para ser hechizado y excitado a control remoto telepática y fractalmente, y ella procreara en condiciones normales a Horus, el Halcón de la Reivindicación y la Restitución. Y como es igual arriba y abajo igual debe sucederle al fálico eje inclinado de la Tierra. Desde afuera, desde el espacio exterior, una serie matemática de fuertes vibraciones “amorosas” y “cariñosas” verticalizarán más al eje respecto del ecuador terrestre alternando con sus “ardores” y “voluptuosos movimientos espasmódicos” en plena cópula hierogámica. El pene sideral de Osiris se prenderá cual dínamo y comulgará con la gran cuca abierta y lechosa de Isis-Tierra para que cambien la geografía, el clima y las estaciones; se recorte la inclinación del eje terrestre; se acelere la rotación; se muden los polos geográficos y el campo magnético terrestre licuado por “deseos” y “sensaciones” extraordinarias que eventualmente pierden ímpetu e intensidad, se desgasten y aquieten tras rítmicas sobreexcitaciones y sobrecalentamientos; y, en consecuencia, a raíz del tohu-bohu, se alteren las columnas del planeta y todo el armatoste civilizado y cultural que sostienen: los campos de cultivos e industrias; los manantiales, ríos, lagos y represas; los pueblos, las ciudades, capitales, puertos y centros cívicos; las bibliotecas, laboratorios, museos, galerías de arte, silos y bodegas; los calendario, las efemérides, el ADN-ARN COLECTIVO; las sacristías, altares, naves, pórticos, portales, vitrales, criptas, donde se coció la Historia, el Arte Sacro o Profano; los observatorios astronómicos que calcularon el Polo Norte Galáctico en Coma Berenices y el Polo Sur Galáctico cercano a Sculptor. En fin, calculo que luego de un lapso espinoso tendrá que venir el esperado renacer tántrico de la Religión en Masa –Violeta Pura y Rosa Fucsia con Botón de Oro- que Remanentes y futuras generaciones conocerán de la mano de Amados Superiores oriundos algunos del Gran Atractor en el supercúmulo de Virgo, vecino del supercúmulo más impenetrable de Coma, de la Gran Muralla de Sloan y aún más allá, tras la Gran Muralla de Boulton-Tåkrã, de la zona del Remolino de Alpha Rêtis. Porque, como ya dije, está en marcha un Plan Divino Interdimensional y nuestra pequeña esfera es apenas un participante más. En base a esta certitud las razones, porqués y paraqués de los cambios que están limpiando, purificando y regenerando a la Tierra no se hallan sino afuera.
Osiris Monarca con el globo terráqueo entre las piernas midiendo los nuevos horizontes geográficos y magnéticos tras el cataclismo del Siglo XXI. Arte hiperrrealista del Autor. Caracas. 2010.
Este ventarrón de sucesos coincidirá con el electrónico undécimo Khristos-Âten, a ser insertado en el Núcleo de la Tierra en el segundo semestre del año 2012, que nos proporcionará gradualmente desde las movedizas placas y mantos tectónicos y ríos de magma una nueva tónica vibratoria, astrofísica, geodésica, geofísica, geográfica, meteorológica o climática y astronómica. El undécimo flordelisado Khristos-Âten llevará en su interior, como si fuera una alcancía o cápsula, una concentración de primorosas y fragantes flores de haoma (o flores de la vida). La inserción intraterrestre se hará al efectuarse los hallazgos astronómicos que Patrick Geryl y Gino Ratinckx hicieron y publicaron en el sensacional libro, La profecía de Orión, cuya erudición respeto enormemente aunque no comparta un 100% todas sus elucubraciones. Lo que he expuesto acá ha estado rondando en mi cabeza hace tiempo. Las cosas que planteo en mis escritos me son sugeridas por mi duende interior y las voces de entidades y espíritus actuales, pasados y futuros, son frutos de mi observación, recolección, análisis y meditación sobre el orden de las cosas. Es grato encontrar que otras almas concuerdan con mi caracoleado astronómico y astrológico ashram-taller-observatorio-laboratorio-jardín decorado. Honi soit qui mal y pense.
La Flor de la Vida. Una variación de la Vesica Piscis. Autor Melian/Images. 
Crédito. www.commons.wikimedia.org/wiki/User:Melian/Images
265:153
Según Wikipedia: “La Vesica Piscis (vejiga de pez en latín) es un símbolo hecho con dos círculos del mismo radio que se intersectan de manera que el centro de cada círculo está en la circunferencia del otro. Esta forma se denomina también mandorla (que significa ‘almendra’ en italiano). Era un símbolo conocido en las antiguas civilizaciones de Mesopotamia, África y Asia.”
“En diversos periodos de la historia ha sido tema de especulaciones místicas; probablemente los primeros fueron los Pitagóricos, que la consideraban una figura sagrada. La razón matemática de su anchura (medida por los puntos extremos del "cuerpo", sin incluir la "cola") por su altura fue aproximada por el cociente 265:153. Esta razón, que da 1,73203, se consideró un número sagrado llamado la medida del pez. Exactamente, la razón geométrica de estas dimensiones es la raíz cuadrada de 3, o 1,73205... (ya que si se traza la línea recta que une los centros de ambos círculos, junto con los dos puntos donde los círculos se intersectan, se obtienen dos triángulos equiláteros unidos por un lado). El cociente 265:153 es una aproximación a la raíz cuadrada de 3, y tiene la propiedad de que no se puede obtener ninguna aproximación mejor con números más pequeños. El número 153 aparece en el Evangelio de Juan (21:11) como el número de peces que Jesús hizo que se capturaran en la milagrosa captura de los peces, lo que algunos consideran como una referencia cifrada de las creencias pitagóricas. Coventry Patmore escribió un poema titulado Vessica Piscis, en la parte XXIV del Libro I de su ciclo The Unknown Eros (El Eros desconocido, 1877)."
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