Aguadora azul derramando su agua bendita. Autor desconocido extraido de la Red.
aunque rujan vientos y se oigan quejidos también suenan trompetas que anuncian alborozos pues tras toda tormenta regresa la calma que, si la mente aguanta y resiste, habrá con qué partir una torta y comer a gusto entre sapitos y papagayos...