DINERO-MONEY-ARGENT: VAMOS A TENER QUE HALLAR UN NUEVO AGENTE DE PROGRESO Y SATISFACCIÓN ACORDE CON LOS NUEVOS TIEMPOS EN MARCHA.
En esencia, nuestra manera de ver la economía, las finanzas, el comercio y, en dos palabras, este asunto del dinero, es un resultado de nuestra filosofía de la vida, nuestra actitud hacia las personas, las cosas, la Naturaleza, la Energía, el Cosmos, la Creación y la Divinidad. Le va a ser sumamente difícil y le costará muy caro a los gobernantes, a las clases dirigentes y a los sectores profesionales con mayores responsabilidades, y, por supuesto, a todas las restantes personas de este mundo, darse cuenta, comprobar y sobre todo entender con la cabeza y con el corazón que ya no podemos seguir así como estamos hoy, viviendo en un mundo soso, artificial, irracional, permisivo, fatuo, excesivamente materialista y frívolo, mientras se gastan enormes sumas de dinero para fabricar armas y poner a millón a ejércitos enteros de autómatas y esclavos, y se permite que naciones ricas acogoten a naciones pobres y las sometan a cánones de vida que son anacrónicos y están desfasados a la luz de la nueva ciencia y tecnología de punta. Hasta que no se le dé más prioridad a los valores espirituales y morales, a la inteligencia y la creatividad, así como a los problemas ecológicos, geográficos, geológicos y geofísicos, nuestra civilización se enfermará y hundirá gradualmente y entrará de lleno en un terreno no explorado y muy peligroso. ¡Ojalá nuestros líderes entren en razón y quieran cambiar sus costumbres y modos de pensar y sentir antes de que sea demasiado tarde! Pero no soy muy optimista. ¡La arrogancia, la soberbia, la insolencia, el egoísmo, la avaricia, la concupiscencia, la ira, la codicia y la ignorancia siempre van juntos de la mano y siempre destruyen lo que se debió preservar y cuidar! ¡Por ejemplo, en el pasado, cuántas bibliotecas no fueron quemadas por turbas enloquecidas y fanáticas! ¡Una sola de ellas, la Gran Biblioteca de Alejandría, en Egipto, fue finalmente quemada entre fines del Siglo IV e inicios del Siglo V, y albergó varios cientos de miles de manuscritos, pergaminos y documentos irreemplazables! RIP.
En consecuencia, para que nuestra civilización no desaparezca por la altanería, incredulidad, suspicacia, ineptitud, ignorancia y cólera de nuestros gobernantes, líderes, gobiernos y países y quede pulverizada por una secuencia phiana de cambios mayúsculos de todos los tipos, clases, grados y signos ya en marcha, desde el socioeconómico, político, religioso, mental y tecnológico, hasta el natural, ecológico, biodiverso, geológico y geofísico, hay que entender ciertos principios elementales: viene una nuevo escaño evolutivo para toda la Humanidad, un nuevo estilo de vida tanto individual como colectivo, un nuevo ángulo, approach y calidad de vida, que forzozamente significará que deberemos revisar, enfocar y sacarle partido a todo lo que la Creación dispuso a nuestro alrededor y en nuestro interior o espíritu. Sé que para la gran mayoria, especialmente para quienes se creen los amos, señores y dueños del conocimiento y las riquezas de nuestro mundo, no resultará fácil aceptar esto con objetividad, simplicidad y humildad. ¿Pero y, si dijera que viene una importantísima y crucial revolución para toda la especie humana en el planeta que incluye hasta sus recursos naturales? No es sólo porque la Tierra estará cada vez más en la mira de un colosal remue-ménage o reacomodo de su manera de ser y existir, porque es imposible que más de 6 mil millones de personas vivan bien, según los actuales estándares de vida, sino porque la transición a un nuevo tipo de civilización y cultura –el del campo unificado de la Supermateria o cono dorado de la Supraconciencia- depende de lo que ya está sucediendo allá afuera, en nuestro Universo, para lo cual no estamos todavía preparados y, sin embargo, a pesar de todo, es necesario e imperativo que nos alistemos porque, si contribuimos con el cambio, alzaremos vuelo como individuos y partícipes de una especie en ascenso. ¿Por qué? Porque, al fin, después de millones de años y haber podido dejar atrás épocas más negras y terribles que la actual, los terrícolas van a poder formar parte de un conglomerado o confederación de planetas, lunas, estrellas, sistemas solares, cúmulos y supercúmulos estelares y galácticos asociados a una elevada y refinada categoría existencial: la Tierra dejará de ser un vulgar lugar de expiación, purgatorio, dolor, castigo e infierno, en otras palabras, de masacres, guerras, miseria y desolación. Así como lo oyen. El ciclo de vida-muerte-resurección, cielo-infierno-limbo, fundamento y raíz de tantos mitos y leyendas, prescribirá. Viene el Reino de los Cielos, el Reino de la Mente Libre y de la Creación Pura y Estelar -Straight to the Heart. Ya pasamos la última curva y entramos a la recta final, a la que llegamos cuando despuntó la Revolución Industrial en Europa y EEUU (precisamente los sitios de nuestro Primer Mundo actual) a mediados del Siglo XIX, cuando nuestra civilización inició la serie de grandes descubrimientos y acercamientos que han revolucionado nuestro Sistema. Gradualmente hemos ido adentrándonos en esta recta final y ya no hay marcha atrás, no se puede desandar lo recorrido que tanto sudor costó. Lo que está en proceso y gestación es irreversible y habrá que hacer cambios y ajustes, hallar nuevas formas de comunicarnos, relacionarnos e interactuar, hallar nuevas formas y medios de ver la vida y hasta de divertirnos, hallar nuevas maneras de socializar con la Madre Naturaleza, y ultimadamente encontrar nuevas herramientas y métodos para encarar con realismo y claridad los grandes dilemas, enigmas y misterios del cosmos y aquéllos que abundan en nosotros mismos que tanto nos confunden a veces. Tendremos que regresar a los clásicos y a los verdaderos estamentos de la Razón, la Intuición, la Imaginación, la Inspiración y la Inocencia, porque está claro que no sabemos vivir todavía en paz y armonía, tener prioridades morales, éticas y estéticas por encima de las estrictamente materiales, animales, escatológicas y temporales, etc.
Gracias a mis padres (que recuerdo con amor y agradecimiento) tuve la oportunidad de ir a los mejores colegios y ser aceptado en varias de las mejores universidades del mundo, como Yale, Princeton, Columbia y Harvard (a ésta última fui por muy poco tiempo porque me decepcionó y me largué), y antes al San Ignacio de Loyola, Le Rosey, Eaglebrook y Hotchkiss, y hoy, a mis 65 años de edad, sigo devorando como un ratón de biblioteca cuanto conocimiento y sabiduría llega a mis manos, ojos, oídos, corazón, alma y aura, y en verdad pienso que deberíamos estar viviendo todos y todas mucho mejor, tanto en Venezuela como en el resto del mundo, disfrutando sin pagar un centavo por nada, en compañía de las plantas, los animales, los minerales y los elementales, como Dios el Andrógino quiso en un principio. Si no ha sucedido, es porque algo no anda bien en el planeta, la cosa está fea y se está poniendo cada vez más fea e insoluble. Habrá que mejorar esto ya que las ideologías y los instrumentos de izquierda como de derecha no sirven para los Nuevos Tiempos en gestación, no están a la altura de la Gran Sublimación en ciernes, para la que solamente el Camino del Medio o del Centro es la solución. La mejoría sólo vendrá, si los líderes y capitanes del mundo, a nivel local, nacional, regional, continental e internacional se revisan primeramente y se dejan orientar e iluminar y luego, habiendo aprendido, se esmeran, articulan, combinan y conjugan, coordinando sus mentes, corazones, esfuerzos y resoluciones, viendo las cosas en conjunto, de un modo integral, global, phia, ondulante, circularmente, como indican las altas matemáticas, el taoísmo, el psicoanálisis y la homeopatía. Los jefes y guías deben dar el ejemplo, actuando con amor y sagacidad, sin soberbia, egoísmo y petulancia. Pienso que América del Sur será el faro. Tengo como 46 años pensando lo mismo y lo he escrito e ilustrado de mil y una maneras, en Violeta Siete, Ula Klampara deñ Waladinos, El Orgasmo de Dios, El Pulso de mi Tierra. Espero algún día, antes de desencarnar, ver mis sueños en vías de realización y superación. ¡Que la Luz nos envuelva a todos y todas sin excepción, por el bien de nuestro chico, bello y prometedor mundo y astro! ¡Seamos Maravillosos Albañiles y Forjadores de una Nueva Alba!
La Nueva Albañilería
El Camino del Medio y del Centro (o cómo arrimarse al mingo ¡y triunfar!)
Todos y todas somos UNO desde y para siempre, como también hijos e hijas del UNO; extraordinarias combinaciones numéricas del Gran Matemático, Geómetra y Arquitecto del Universo. Saberlo debería causarnos honda alegría, estimularnos y enderezarnos, abrirnos a insospechadas e infinitas posibilidades, recursos y realizaciones. ¿Por qué entonces nuestro amado planeta Tierra ha sido un Purgatorio? ¿Acaso nos desviamos y degradamos? ¿Perdimos la brújula? Llega la Hora Cero. Convirtámonos en albañiles iluminados, trabajemos en equipo para un nuevo y resplandeciente Amanecer Áureo, que transformará nuestro modo y nivel de vida, manera de pensar, sentir y expresarnos. ¡Busquemos lo divino, puro, maravilloso, prodigioso, mágico y milagroso en nuestro ser interior y pronto veremos cómo el Reino de los Cielos se abre de par en par!
40 Años Pi 1982-2022 + 18= 2040 (Plutón entra definitivamente en Aquarius)
El año de 1982 será el comienzo del fin de nuestra Era que será marcado por 7 eclipses. Esto y lo que sigue lo escribí en 1981 para la segunda edición de El Pulso de mi Tierra, publicado en abril de 1982, donde figuró mi primer artículo, “Nuevos Liderazgos en Venezuela”, para el vespertino El Mundo, incluido con los demás artículos que redacté para ese diario en el aún inédito El Cáncer de Venezuela:
Debemos superarnos todos y todas porque lo que nos espera en las próximas 2 décadas es candanga. Aunque miles de nuevos inventos, redescubrimientos y brechas tecnológicas, mentales, morales y sociales están llevándonos hacia un brillante futuro auroral, vaticinado por antiguos y modernos videntes, astrólogos, ocultistas, escritores y estudiosos de distintas ciencias modernas, antes toda suerte de calamidades desgarrarán nuestro planeta. En mi opinión, los años más críticos serán entre 1982-1988, 1992-1993 y 1995-2002.
Cuando estaba trabajando en este texto, que apareció antes en inglés, en The Wisdom of Sidereal Astrology, no fui más allá del año 2002 por varias razones, siendo una de ellas que para ese momento Urano, el Revolucionario, Precursor e Inventor, entraría definitivamente en la constelación de Akuario y sabiendo de antemano lo violento, impredecible e innovador que iba a resultar su tránsito en este campo estelar. Precisamente ese año del 2002, del 11 al 13 de abril, nuestra patria vivió momentos de convulsión, confusión, bochorno, y, el 11 de septiembre del 2001 volaron las Torres Gemelas en Nueva York, como voló también la seguridad en mil pedazos en todo el planeta. Seguiremos sufriendo estas consecuencias durante mucho tiempo. Urano todavía sigue en Akuario y permanecerá allí hasta enero del 2010 cuando entrará definitivamente en Piscis. Pero ahí me quedé, en el 2002, acompañando a Benjamín Solari Parravicini, quien se refirió en múltiples ocasiones al 2002 como un año singular, porque a partir del 2002 Urano nos cambió astral, política, económica y espiritualmente, y esta metamorfosis se agudizará con el paso de los años hasta que cientos de OVNIS aterrizen y americen.
Ahora voy a ir un poco más lejos, 20 años más lejos, porque me ha llamado la atención una secuencia y progresión numérica basada en la clave de 2 o Π. En el 2012 tendremos un “abrir y cerrar de ojos”, un “cambio de voltaje iónico”. Sobre este año ha corrido mucha tinta erudita y es cierto que va a haber “un pase fuerte electromagnético”, un “radical cambio de suiche”. Termina un ciclo del calendario maya pero también comienza un nuevo ciclo o mini-ciclo, para ser preciso, cuando “el águila del norte va a viajar hacia las tierras de la cóndor del sur para que ésta dé a luz un par de mellizos”. Recordemos que hay cóndores desde Colombia y Venezuela hasta Tierra del Fuego. No es por azar o capricho de la Naturaleza. Los Andes y el Macizo de Guayana representan la nueva columna vertebral del globo. Por lo tanto, cuando Neptuno ingrese a Akuario definitivamente en el 2009, permaneciendo allí hasta el 2023, la Humanidad será halada hacia arriba; pero también significará que no toda la población del mundo podrá sintonizarse con la elevación, depuración, destilación, refinación, transmutación, sublimación e incorporación de elementos hasta ahora ignotos y extraterráqueos. Habrá una nueva Tabla Periódica de los Elementos y se descubrirá un nuevo Elemento, el minervio, y otros más. Como acaecerá un nuevo Diluvio, un nuevo Estado del Tiempo Presente (que preví en Prangins, Suiza, en 1962) el calendario tendrá que ser recalculado y ajustado gradualmente a medida que el eje de la Tierra se desplace. Entre 2014 y 2016 la Tierra será sacudida y muy visitada desde el espacio exterior. También lo será en el 2020. Siendo los pasos de Urano y Neptuno pesados y muy influyentes, y más si estamos hablando de un planeta que tiene su domicilio en Aquarius (Urano) y de otro que se exalta o trona en Aquarius (Neptuno), podemos concluir que nos hallamos en el umbral de una Nueva Era (de Aquarius-Leo) que se irá desvistiendo poco a poco; más aún si Baco o Dionisos está ahora en Leo y seguirá allá por muchos años más. Baco se exalta también en Aquarius. Luego está la intromisión de Nibiru-Mardûk-Hercólubus en nuestro sistema solar. Su efecto en la Tierra será impactante lo cual creará una secuencia de horrores y desbarajustes incalculables, de mutaciones y revelaciones juanistas. Venezuela, llamada a botón, debe prepararse muy bien pues le espera una misión aristocrática que consistirá en mostrar una ALTERNATIVA REAL-ESPIRITUAL-FILOSÓFICA-SOCIAL-POLÍTICA-AMBIENTAL-CIENTÍFICA-ECONÓMICA-ASTROFÍSICA. El mundo tendrá los ojos puestos en Amérika del Sur, allí está el futuro de la civilización que ya en 1962, en El Orgasmo de Dios, apunté poéticamente, luego que pasemos esta etapa de transición actual, “rojo-rojita”, tan cruel como absurda, desafortunada, crítica y desequilibrada por su gran caudal de odio, renconcomio y retaliación social y profesional. El futuro será de un azul intenso y turquesino, como el doradísimo cielo de estrellas de las pinturas religiosas del período gótico y pre-Renacimiento italiano en manos de genialidades como Lorenzetti, Giotto, Cimabue, Fra Angelico, Mantegna, Masaccio, della Francesca y tantos otros. Es nuestro deber, como servidores del Bien Público, ayudar a que este lapso sea lo más corto, armónico, suave, amoroso, solidario y brillante, para que se instaure el Socialismo Místico que sustituirá al salvaje Capitalismo y Comunismo totalitarios, policíacos, demenciales y unidimensionales. AUM.
2002-2012: adiestramiento y preparación integral de una élite responsable.
2013-2014-2016-2018-2020-2022-2040: maná & éxodo y también ozono.
1982-2022: 40 años: un ciclo mesiánico y mitad de un ciclo del Gran Cinturón de Transporte. Chequear en Google documentos e imágenes sobre fotones, manchas solares, fractales, teorías del caos, color, determinismo dinámico, pensamiento en espiral, valor phi. La cópula genial entre la Nueva Ciencia y la antigua Filosofía que nos conducirá a la Quinta Dimensión transformando enteramente el Arte de la Visión.
2020: Ajuste importante. A mi juicio y entender, el 2002 de Benjamín Solari Parravicini probablemente no sea otro, es decir, corresponda, al 2020. El Solsticio de Invierno Boreal y Solsticio de Verano Austral (hoy 2008) del 2020 coincide con una conjunción Júpiter-Saturno a 6º de Capricornio, un evento cósmico clave que marcará el camino sideral que nos llevará a una nueva Edad de Oro planetaria que se irá desplegando gradualmente contra viento y marea. Diciembre del 2020 será una Navidad heráldica. Una nueva conjunción planetaria conducirá en la Tierra a quienes estén tras la Nueva Luz o Proporción Áurea. Triunfo No. 17 del Tarot.
Extractos de El Orgasmo de Dios, páginas 201-202, 2da. edición, 1992.
“Yo creo sinceramente que la libertad es vivir absolutamente en la eternidad y en el momento. El ser que vive en el presente vive en todas las épocas y todo le parece lo mismo. No necesita de nada, ni de amuletos ni de ilusiones o deseos. ES. No pertenece a ninguna terminología. Es como dice el dicho: libre como el viento. No tiene cerebro porque no lo necesita. No piensa. No se mueve. No se pasa el santo día leyendo los periódicos o masturbándose por causa de una imagen o de una ilusión. Como se identifica con Todo deviene Todo y Todo entonces está pepiado y además arreglado. ¿Pero hoy es éste el panorama mundial? Miren, yo creo en todas las posibilidades. Si todas las mujeres y todos los hombres cooperaran por el bien del que sea y de lo que sea, carajo, ¡qué es lo que no se realizaría! Otra vez, o todo o nada. Bien extraño este dicho. Es la clave de la iluminación y, sin embargo, no le prestamos caso. Y esto es lo esencial de la guarandinga: sea el camino qu’emprendamos será la Nada o el Todo qu’encontraremos. Si sólo nos diéramos cuenta de que todo ya ha sido prescrito y sentenciado por obra y gracia del Espíritu Santo no estaríamos tan famélicos como en la India o tan nerviosos como en Estados Unidos. ¡pero, claro a quién le importa un bledo el Espíritu Santo!...
“Lo que se destacará arrastrará centellas de marfil y lechuzas de morfología magnífica. Entrarán los alimentos provinciales y prodigiosos por los canales libres y etéreos. Los genios arquitectos aprovecharán el genius loci con múltiple celebración e instinto. El instinto será básico y fúlgido. El fulgor será como la fulguración de la ionización.
“A la mutación. A la antorcha olímpica de las tareas resguardadas. ¡Que toque la trompeta! ¡Que toque la guitarra! ¡Que toque la dentadura! ¡El rito del orgasmo, el grito del orgasmo, el frito del orgasmo, el drito del orgasmo, el writo del orgasmo, el zrito del orgasmo, el lorito del orgasmo, el torito del orgasmo, el kristo del orgasmo.
“A la reaparición. A la búsqueda del compás. ¡Que vuelen las aceitunas! ¡Que vuelen las lámparas! ¡Que vuelen los postes! ¡Renacerá el cóndor! ¡Renacerá la serpiente emplumada! ¡Renacerá la orquídea! ¡Renacerá el bisonte y el cactus! ¡Renacerá el gallo de oro! ¡Renacerá el caribú! ¡Renacerá el hierro! ¡Renacerá el jaguar! ¡Renacerá el café! ¡Renacerá la bauxita! ¡Renacerá el platillo volador y las chispas doradas! ¡Renacerá el tambor! ¡Renacerá el lago! ¡Renacerá el mero! ¡Renacerá la marabunda! ¡Renacerá el atlante baquiano! ¡Renacerá la cordillera! ¡Renacerá el fuego! ¡Renacerá el Trópico de Cáncer! ¡Renacerá el Trópico de Capricornio! ¡Renacerá el Ecuador! ¡Renacerá el Polo Norte! ¡Renacerá el Polo Sur! ¡Renacerá el volcán! ¡Renacerá el éxtasis! ¡Renacerá l’arquitectura! ¡Renacerá l’antracita! ¡Renacerá el maíz! ¡Renacerá la estructura osal! ¡Renacerá la promiscuidad sideral! ¡Renacerá la playa! ¡Renacerá amorea!
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Hoy es 24 de diciembre de 1964. Vivo en la Villa Duthy No. 15, cerca de donde el pintor venezolano, Manuel cabré, se hospedó otrora. París parece estar alzada. La gente continúa comprando regalos a todo vapor, las tiendas sudan y aúllan como nunca, la circulación en las calles es patológica y yo tengo un cansancio bien fastidioso. Pero esta Navidad como las otras desde Belén es, a mi entender, completamente artificial y sin sentido. La gente adorna a profusión los restaurantes y las tiendas y supermercados, mas luz roja, me doy cuenta que de nada sirve. La gente sigue agresiva, rapaz, angustiada y pavosa. Para mí festejar es festejar adentro y afuera, por dentro y por fuera. Festejar durante 365 días y noches y mañanas y no sólo durante 14 días y noches y mañanas. Festejando la ecuación bisiesta y justiniana, festejando el natalicio de Gautama y el de San Juan Bautista, festejando mi aniversario todas las fracciones de segundo porque mi aniversario es el mismo qu’el del universo. ¡Ave a ti, guagancó!
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Caracas, 2005-2006-2007-2008
lunes, 6 de octubre de 2008
Rê-Atum
Rê-Atum. Faraón iluminado por el Âtén armado con el potente rayo láser de su ãnkh siguiendo el trayecto de la espiral logarítmica en su sombrero cónico conectado con la red intergaláctica. Rê-Atum. Faraón iluminado por el Âtén armado con el potente rayo láser de su ânkh siguiendo el trayecto de la espiral logarítmica en su sombrero cónico conectado con la red intergaláctica.
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Cuando en Roma, en 1961, me fajé a trabajar en la TAU
Cuando en Roma, en 1961, me fajé a trabajar en la TAU del Ente Supremo en la mente de kien está en estado de éxtasis. La misma reapareció en "El Orgasmo de Dios".
A mi hermano Omar Benavides en Miami, con cariño
Cuando en Roma, en 1961, me fajé en el manuscrito de La Cárcel, que dejé por Apuntes Generales y Las Bufonadas, que con el tiempo se volvieron El Rito del Falo, El Rito del Orgasmo y finalmente El Orgasmo de Dios, y por razones nada anodinas usé el alias de Antón Petrovitch Kazímov (con acento en la í), en vez de mi nombre y apellido paterno y materno, nada sabía entonces que San Antonio o Antón abad (215-356 después de C.), el monje egipcio y cristiano, fundador del movimiento eremítico, tuvo como símbolo principal a la famosa letra taw del alfabeto hebreo o tau del alfabeto griego, una variante del ankh egipcio, el signo de vida y felicidad que las divinidades egipcias y los faraones y las faraonas cargaban en sus manos mientras realizaban sus ritos interespaciales. Eons of Dignity by Cybertribe y Best of Buddha by Radar.
Pasarían los años y a veces de un modo intuitivo iba empleando este símbolo cada vez más. Pasarían los años y gradualmente iba estableciendo semejanzas y descubriendo afinidades con San Francisco de Asís que también hizo de la tau su signo favorito. Cuando viajé con mamá por gran parte de Italia no quise dejar de ir a Assisi y Siena pues me llamaban la atención por su refinamiento y encanto. Pero no fue sino tras unirme a Linditi –la otrora Hermana Clara o Claro de Luna, fundadora de la Orden de las Clarisas pobres y descalzas- que la imagen y personalidad del hermano Francisco cobró un significado que resaltó. Primero, los Hermanos de Arriba le hicieron saber que era cierto que él y yo estábamos muy ligados así como con Linditi, quien comenzó a colocar una vieja estampa del hermano franciscano junto a mi foto y un día se me reveló esto: en una vida anterior fui el Hermano Sol de Assisi y eso explicaba muchas cosas en mí. Me puse a echar para atrás, en esta vida, a encontrarle razones a ciertas actitudes y hechos: el porqué de mis reacciones alucinantes y tormentosas con Jesús o rebeldes frente a la Iglesia Católica, la gente rica y las clases dominantes en general. Otro rompecabezas místico resuelto y aclarado. Lo que me queda ahora es continuar la obra heroica iniciada hace millones de años como reptiliano al servicio del Gran Psión. Años atrás, en París, en 1964, Gérald Robitaille, quien fue secretario del gurú Henry Miller, en un grito de profunda emoción, me espetó: “¡pero es que eres más pobre que San Francisco de Asís!”. Y Gérald no estaba tan lejos de la verdad porque si no hubiera sido por mi papá y mi mamá ya estaría requeteenterrado en un campo santo de Galicia o arrastrándome y viviendo hoy en la calle, cual indigente, pidiendo limosna, con cartones y bolsas negras y grises por cama (quién creería que durante estos últimos 5 años y medio hemos tenido que poner bolsas de basura en vez de cortinas en el cuarto de dormir del apartamento donde hemos vivido después que nos botaron sin piedad, por egoísmo, avaricia y mezquindad, de La Puerta Celeste). Me ha sido prácticamente imposible ganarme honesta y dignamente unos churupos con lo que sé hacer, como pensar, pintar y escribir. Hasta hoy cuando me gano algún dinerito es porque me tienen lástima o por caridad y eso que no me han faltado ideas, innovación, imaginación, ambición, pujanza y tesón, hasta en el campo de las finanzas y la publicidad. A esta altura de mi vida sigo pareciendo un monje antoniano o franciscano que debe humillarse, hacer malabarismos, y pasar por loco o tonto para que entre burlas y muecas sarcásticas nos tiren una que otra limosna o bocado.
Santa Clara de Asís. Óleo de Simone Martini (1284-1344).
Detalle de San Francisco de Asís. Óleo de Stefano di Giovanni di Consolo da Cortona, conocido también como Sassetta o il Sassetta (1392-1450/1451).
Copiaré ahora varios fragmentos fractales y espiraloides de El Orgasmo de Dios, páginas 166-169 de la 2da. edición, donde hago mención de la letra tau. Este pasaje lo compuse mientras me encontraba en la Clínica de Reposo en Prangins, Suiza. Mientras estuve allí estaba, como decía Henry Miller, recibiendo “dictados” del Cielo, me sentía “inspirado” y me ponía a escribir sin parar, dos o tres horas seguidas, interrumpiéndome sólo para tomar agua, orinar o ver por la ventana el cielo, los Alpes, los árboles, el jardín y el lago Léman. Cuando el artista está inspirado es como si estuviera enchufado a una central cósmica electrodinámica, hidro y termoeléctrica. He sido bendecido por estar así una pila de veces. Las palabras brotan del interior, las frases se encadenan unas con otras, siguiendo un ritmo bárbaro, frenético, insistente, teledirigido e inteligente, como si un potente y dionisíaco géyser brotara con tal fuerza que apenas da tiempo de anotar (antes se escribía a mano o a máquina, pero ahora, con la computadora, el copiado es más exacto, legible y fidedigno y, sin embargo Quien Está Dictando se transporta hasta uno a velocidad Mach 1000 y como se comprenderá es impensable, imposible, demasiado fantástico y surrealista esperar transcribir todo el abracadabra de un modo exacto, justo y meridiano como espera el Venerable Maestro de Orø).
“El que no desprende más que horripilación en las delicias de las comidas terrestres (y para mí el verbo es pan y agua), el que presume ser lo suficientemente astuto para sobrepasar los obstáculos y después acomodarse irresponsablemente en los tronos etéreos, pues está archiequivocado. ¿Cómo ansían ustedes saborear lo eterno, lo sin estrenar, lo fragante, lo tranquilo, lo desordenado y lo violento, lo angustioso y peligroso, lo irremediable y eventual, cuando no hacen más que cultivar la ciencia del onanismo y blasfemar contra la última mariposa del Credo? ¡Diantre! Hombres Contemporáneos, ¿anhelan ustedes devenir los padres y las hijas del futuro? Échenle un vistazo a Margot, aquí al lado mío…la puta de las putas, la mujer fargallona, bestia nutrida en el plenum de caricias y embustes, áspero sueño convertido en alucinaciones innombrables, regocijos malcontados y pulverizados en laberintos intercalares, creaciones sin conclusión o introducción, rumbo ni suspenso, vida extinta d’esperanza y asociaciones, quejidos de boca bermellona en medio de orgasmos mates; coño taladrado, hinchado, alquimizado y chutado por artefactos marcianos, paracaídas venusinos, kayacs saturninos; y permanente soledad, pared sin muros, huella sin imprentas, útero deformado, estéril, puyado y boca abajo. Y después más aislamiento, siempre aterrada si se reúne con el ciclón espectral e ilógico: y nunca razón y nunca armonía, mas cacofonía y chorros de semen y lenguarazos ofidianos y misterio con orientalismo y convulsiones sanguíneas y el peristalsis ahumado tergiversado mermado y los vasos capilares llenos de ajenjo caolín aqua vitae y lápizlázuli; mas, igualmente, muerte, amargura, aniquilación, murmullos tuberculosos. ¡Ah, el farfullar en el tope del éxtasis! Y jamás invernaderos, mercurocromo, sal; menos aún berilo, ni amor en conjunto, ni conjunciones de Júpiter con el Avatar, ni sinceridad; menos aún índigo o verde prusiano; pero sí iras, mentiras, decepciones, engaños, cuarentena. Rada, rada, rada…¡Ay, préstenme atención! ¡Pregúntenle a Margot, si no se caga a diario en sus pantaletas! Si no llora, si no se mea, si no carcajea también. Pero, over all, pregúntenle, si vivir sin esperanza, significa admitir derrota, ruina, ¡desesperación y futilidad! ¡Qué va! Yo muchas veces la he sorprendido maldiciendo su destino, su posición, su envenenamiento, su glándula pineal. Esto es natural y sano. Sin embargo, yo nunca la he oído ni la oiré exclamar (la conozco hasta en sus sueños) que no desearía que la vida se repitiera perpetuamente. ¡Escuchen! Pues hay que levantarse y levantarse mil y una veces, hasta triunfar con el sol adentro y sin temor ni dolor. El hombre avanza hacia la felicidad: amor y tau. El hombre, también, se supera para dominar a los terremotos y alzarse encima de las sacudidas. Siempre olfateamos una meta, un muelle, una posada, pero tan pronto aplicamos la mecha al cebo y tributamos un holocausto a los dioses, la guabinosa conciencia berrea: ‘regresa, regresa, e innova de nuevo’. Ya que a menudo preferimos perdernos qu’encontrarnos. Cuando adquirimos sabiduría, riquezas, control, cuando vencemos el miedo y la solitud, apunta el cansancio y cual una prosaica amazona sucumbimos a la picadura de la naja. Nos fascina la guerra. Un oficio alpinista. Voluminamos la voz para que las palmeras se desplacen, suspiramos para que nuestros amantes aticen el fuego de la piedra angular en nuestras pirámides y círculos anatómicos. Y con arcilla del chamán insistimos en ideogramar nuestros males. Sobrecargamos nuestros lomos con pesares y bultos para morder polvo, inclinamos la balanza para edificar incesantes órdenes e incesantes vistas panorámicas; y, porque da pena la estupidez & la ignorancia & la cueldad de nuestros hermanos y hermanas, no prevalecemos porque no aspiramos a ser coronados sino a coronar a otros, nos exaltamos para que la Historia aplauda nuestra mostaza, nos enfermamos para que que no nos atiendan y nos dejen cual perros bravos, llevamos la palma para que digan que nuestras crucifixiones irradian hermosura y enigmas, y, por último, casi todos marchamos en la oscuridad, unos sin saberlo, otros sabiéndolo. Allá, al final, en la alborada, se prende un fósforo extraordinario y trascendental. La sola manera de apadrinarlo es a través de la emancipación, de la pasión en cualquiera de sus mil rayos, y, de la generosidad.
Fénix Real. En homenaje a la Nueva Puerta de Venezuela en Puerto La Cruz, Edo. Anzoátegui, por donde llegará la energía hasta Guayana (Uiana). Versión rosacruz del Autor. Caracas. 2006.
“El Café Terminal, tras el discurso inflamado de Juan parecía una morgue. El silencio era total. Mas pronto, como si un demonio se hubiera inmiscuido discretamente entre los taburetes del bar y el barman, chucheos y trancazos comenzaron a empinarse precipitadamente, acalorándose, hasta que una sarcástica, enconada y atroz carcajada reventó en el Café. Todo el mundo parecía padecer de delirium tremens. Las pinturas eróticas que adornaban los techos lanzaron unoa clamores de alarma y los eunucos que servían los cafecitos y el peyotl se castraron right in front of the ladies. La multitud ululaba que Juan tenía que ser linchado, apedreado, machucado y pataleado. Se pedía su pericráneo y cabellera y un precio se fijó. Era ésta una multitud electrificada y presa de loca incertidumbre. Las damas se rasgaron sus vestidos y los hombres avanzaron furibundos hacia Juan y Margot. Rápidamente Juan tomó por el brazo a Margot y se la llevó hasta la puerta del Café. Iba a gritar algo cuando un botellazo le rompió la frente. ¡Qué lío se estaba formando! En medio del tumulto, entre insultos, empujones y carajazos, Juan y Margot pudieron escapar, no sin que a ésta última le escupieran encima. Su faz estaba torcida por el dolor, lucía franca como pétalo de lis, lúcida y penetrante como l’atavística Chu que persiguen los bufones; y, sin embargo, igualmente cruda y aguda y supersticiosa. Era como un alma mordida por la desolación. Si esta hembra parecía existir con cadenas alrededor de su cuello marfileño, si esta hembra personificaba la diosa desterrada, su carrera semi-legendaria y semi-histórica era cual un estigma cruento que aviva al desdichado cuando su sitar no es acogido en los círculos de los demás. Juan era Hefaistos, Urano y Sileno; más aún, era Venus, Juno, Urania y Deméter. Ah, Juan y Margot hicieron el amor esa noche al margen del sufrimiento. Sus cuerpos exhalaron un poder inmenso. Se amaron vorazmente. Se extirparon las heridas con grandiosos encuentros genitaloides. La curación que conoce todo ser viviente tuvo lugar en un cuarto viejo y colonial, cuyo balcón daba sobre una calle perfumada con melodías carnavalescas. Carnaval de calvarios, precedidos por luces de bengala y faisanes igniscentes, 3 horas idas para Juan y Margot. Carnaval inspirado en las cavernas de Kohistán y empinado en el pico más increíble del Himalaya. Danzas estrambóticas sin ensayo. Pura consonancia, pura euforia. Revolución. Y cuando los primeros rayos de luz cruzaron las rendijas de las ventans, los pies de Margot culebreados entre los de Juan, sus tetas húmedas, suculentas, montuosas, envueltas en las manos hirvientes de Juan, su cabellera india y azabache englobando los ojos azules del macho, l’habitación destellaba una fulgencia anormal y longeva capaz d’encandilar a millones de corazones carbonizados. Era iris, lucero, oriente salvador. Era el sacrificio voluntario para la redención de los climas borrosos. Y, cuando al fin se despertaron los incestuosos, en pleno mediodía, encontraron muchas palomas, muchas ocas, muchos caribúes, muchos gorriones, muchos peces cantantes, muchos perros de Terranova esperándolos en el florido balcón.
EL CÍCLOPE DE TINEH
“Juan le contó una vez a Margot que la personalidad se orientaba hacia 2 polos opuestos para alimentarse @ π 9 de fuerzas pujantes. Si él lograba conducirse en estado de completa lucidez cada vez que variaba su personalidad y demostraba que, en realidad, era varias personas diferentes, su existencia nunca terminaría. Mediante gustos, modales, ideas, sensaciones, cálculos y teorías contradictorias, él podía intuir la multiplicación de la individualidad. Lo que era difícil era mantener absoluta sinceridad hacia sí mismo y hacia cada una de las infinitas tensiones.”
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A mi hermano Omar Benavides en Miami, con cariño
Cuando en Roma, en 1961, me fajé en el manuscrito de La Cárcel, que dejé por Apuntes Generales y Las Bufonadas, que con el tiempo se volvieron El Rito del Falo, El Rito del Orgasmo y finalmente El Orgasmo de Dios, y por razones nada anodinas usé el alias de Antón Petrovitch Kazímov (con acento en la í), en vez de mi nombre y apellido paterno y materno, nada sabía entonces que San Antonio o Antón abad (215-356 después de C.), el monje egipcio y cristiano, fundador del movimiento eremítico, tuvo como símbolo principal a la famosa letra taw del alfabeto hebreo o tau del alfabeto griego, una variante del ankh egipcio, el signo de vida y felicidad que las divinidades egipcias y los faraones y las faraonas cargaban en sus manos mientras realizaban sus ritos interespaciales. Eons of Dignity by Cybertribe y Best of Buddha by Radar.
Pasarían los años y a veces de un modo intuitivo iba empleando este símbolo cada vez más. Pasarían los años y gradualmente iba estableciendo semejanzas y descubriendo afinidades con San Francisco de Asís que también hizo de la tau su signo favorito. Cuando viajé con mamá por gran parte de Italia no quise dejar de ir a Assisi y Siena pues me llamaban la atención por su refinamiento y encanto. Pero no fue sino tras unirme a Linditi –la otrora Hermana Clara o Claro de Luna, fundadora de la Orden de las Clarisas pobres y descalzas- que la imagen y personalidad del hermano Francisco cobró un significado que resaltó. Primero, los Hermanos de Arriba le hicieron saber que era cierto que él y yo estábamos muy ligados así como con Linditi, quien comenzó a colocar una vieja estampa del hermano franciscano junto a mi foto y un día se me reveló esto: en una vida anterior fui el Hermano Sol de Assisi y eso explicaba muchas cosas en mí. Me puse a echar para atrás, en esta vida, a encontrarle razones a ciertas actitudes y hechos: el porqué de mis reacciones alucinantes y tormentosas con Jesús o rebeldes frente a la Iglesia Católica, la gente rica y las clases dominantes en general. Otro rompecabezas místico resuelto y aclarado. Lo que me queda ahora es continuar la obra heroica iniciada hace millones de años como reptiliano al servicio del Gran Psión. Años atrás, en París, en 1964, Gérald Robitaille, quien fue secretario del gurú Henry Miller, en un grito de profunda emoción, me espetó: “¡pero es que eres más pobre que San Francisco de Asís!”. Y Gérald no estaba tan lejos de la verdad porque si no hubiera sido por mi papá y mi mamá ya estaría requeteenterrado en un campo santo de Galicia o arrastrándome y viviendo hoy en la calle, cual indigente, pidiendo limosna, con cartones y bolsas negras y grises por cama (quién creería que durante estos últimos 5 años y medio hemos tenido que poner bolsas de basura en vez de cortinas en el cuarto de dormir del apartamento donde hemos vivido después que nos botaron sin piedad, por egoísmo, avaricia y mezquindad, de La Puerta Celeste). Me ha sido prácticamente imposible ganarme honesta y dignamente unos churupos con lo que sé hacer, como pensar, pintar y escribir. Hasta hoy cuando me gano algún dinerito es porque me tienen lástima o por caridad y eso que no me han faltado ideas, innovación, imaginación, ambición, pujanza y tesón, hasta en el campo de las finanzas y la publicidad. A esta altura de mi vida sigo pareciendo un monje antoniano o franciscano que debe humillarse, hacer malabarismos, y pasar por loco o tonto para que entre burlas y muecas sarcásticas nos tiren una que otra limosna o bocado.
Santa Clara de Asís. Óleo de Simone Martini (1284-1344).
Detalle de San Francisco de Asís. Óleo de Stefano di Giovanni di Consolo da Cortona, conocido también como Sassetta o il Sassetta (1392-1450/1451).
Copiaré ahora varios fragmentos fractales y espiraloides de El Orgasmo de Dios, páginas 166-169 de la 2da. edición, donde hago mención de la letra tau. Este pasaje lo compuse mientras me encontraba en la Clínica de Reposo en Prangins, Suiza. Mientras estuve allí estaba, como decía Henry Miller, recibiendo “dictados” del Cielo, me sentía “inspirado” y me ponía a escribir sin parar, dos o tres horas seguidas, interrumpiéndome sólo para tomar agua, orinar o ver por la ventana el cielo, los Alpes, los árboles, el jardín y el lago Léman. Cuando el artista está inspirado es como si estuviera enchufado a una central cósmica electrodinámica, hidro y termoeléctrica. He sido bendecido por estar así una pila de veces. Las palabras brotan del interior, las frases se encadenan unas con otras, siguiendo un ritmo bárbaro, frenético, insistente, teledirigido e inteligente, como si un potente y dionisíaco géyser brotara con tal fuerza que apenas da tiempo de anotar (antes se escribía a mano o a máquina, pero ahora, con la computadora, el copiado es más exacto, legible y fidedigno y, sin embargo Quien Está Dictando se transporta hasta uno a velocidad Mach 1000 y como se comprenderá es impensable, imposible, demasiado fantástico y surrealista esperar transcribir todo el abracadabra de un modo exacto, justo y meridiano como espera el Venerable Maestro de Orø).
“El que no desprende más que horripilación en las delicias de las comidas terrestres (y para mí el verbo es pan y agua), el que presume ser lo suficientemente astuto para sobrepasar los obstáculos y después acomodarse irresponsablemente en los tronos etéreos, pues está archiequivocado. ¿Cómo ansían ustedes saborear lo eterno, lo sin estrenar, lo fragante, lo tranquilo, lo desordenado y lo violento, lo angustioso y peligroso, lo irremediable y eventual, cuando no hacen más que cultivar la ciencia del onanismo y blasfemar contra la última mariposa del Credo? ¡Diantre! Hombres Contemporáneos, ¿anhelan ustedes devenir los padres y las hijas del futuro? Échenle un vistazo a Margot, aquí al lado mío…la puta de las putas, la mujer fargallona, bestia nutrida en el plenum de caricias y embustes, áspero sueño convertido en alucinaciones innombrables, regocijos malcontados y pulverizados en laberintos intercalares, creaciones sin conclusión o introducción, rumbo ni suspenso, vida extinta d’esperanza y asociaciones, quejidos de boca bermellona en medio de orgasmos mates; coño taladrado, hinchado, alquimizado y chutado por artefactos marcianos, paracaídas venusinos, kayacs saturninos; y permanente soledad, pared sin muros, huella sin imprentas, útero deformado, estéril, puyado y boca abajo. Y después más aislamiento, siempre aterrada si se reúne con el ciclón espectral e ilógico: y nunca razón y nunca armonía, mas cacofonía y chorros de semen y lenguarazos ofidianos y misterio con orientalismo y convulsiones sanguíneas y el peristalsis ahumado tergiversado mermado y los vasos capilares llenos de ajenjo caolín aqua vitae y lápizlázuli; mas, igualmente, muerte, amargura, aniquilación, murmullos tuberculosos. ¡Ah, el farfullar en el tope del éxtasis! Y jamás invernaderos, mercurocromo, sal; menos aún berilo, ni amor en conjunto, ni conjunciones de Júpiter con el Avatar, ni sinceridad; menos aún índigo o verde prusiano; pero sí iras, mentiras, decepciones, engaños, cuarentena. Rada, rada, rada…¡Ay, préstenme atención! ¡Pregúntenle a Margot, si no se caga a diario en sus pantaletas! Si no llora, si no se mea, si no carcajea también. Pero, over all, pregúntenle, si vivir sin esperanza, significa admitir derrota, ruina, ¡desesperación y futilidad! ¡Qué va! Yo muchas veces la he sorprendido maldiciendo su destino, su posición, su envenenamiento, su glándula pineal. Esto es natural y sano. Sin embargo, yo nunca la he oído ni la oiré exclamar (la conozco hasta en sus sueños) que no desearía que la vida se repitiera perpetuamente. ¡Escuchen! Pues hay que levantarse y levantarse mil y una veces, hasta triunfar con el sol adentro y sin temor ni dolor. El hombre avanza hacia la felicidad: amor y tau. El hombre, también, se supera para dominar a los terremotos y alzarse encima de las sacudidas. Siempre olfateamos una meta, un muelle, una posada, pero tan pronto aplicamos la mecha al cebo y tributamos un holocausto a los dioses, la guabinosa conciencia berrea: ‘regresa, regresa, e innova de nuevo’. Ya que a menudo preferimos perdernos qu’encontrarnos. Cuando adquirimos sabiduría, riquezas, control, cuando vencemos el miedo y la solitud, apunta el cansancio y cual una prosaica amazona sucumbimos a la picadura de la naja. Nos fascina la guerra. Un oficio alpinista. Voluminamos la voz para que las palmeras se desplacen, suspiramos para que nuestros amantes aticen el fuego de la piedra angular en nuestras pirámides y círculos anatómicos. Y con arcilla del chamán insistimos en ideogramar nuestros males. Sobrecargamos nuestros lomos con pesares y bultos para morder polvo, inclinamos la balanza para edificar incesantes órdenes e incesantes vistas panorámicas; y, porque da pena la estupidez & la ignorancia & la cueldad de nuestros hermanos y hermanas, no prevalecemos porque no aspiramos a ser coronados sino a coronar a otros, nos exaltamos para que la Historia aplauda nuestra mostaza, nos enfermamos para que que no nos atiendan y nos dejen cual perros bravos, llevamos la palma para que digan que nuestras crucifixiones irradian hermosura y enigmas, y, por último, casi todos marchamos en la oscuridad, unos sin saberlo, otros sabiéndolo. Allá, al final, en la alborada, se prende un fósforo extraordinario y trascendental. La sola manera de apadrinarlo es a través de la emancipación, de la pasión en cualquiera de sus mil rayos, y, de la generosidad.
Fénix Real. En homenaje a la Nueva Puerta de Venezuela en Puerto La Cruz, Edo. Anzoátegui, por donde llegará la energía hasta Guayana (Uiana). Versión rosacruz del Autor. Caracas. 2006.
“El Café Terminal, tras el discurso inflamado de Juan parecía una morgue. El silencio era total. Mas pronto, como si un demonio se hubiera inmiscuido discretamente entre los taburetes del bar y el barman, chucheos y trancazos comenzaron a empinarse precipitadamente, acalorándose, hasta que una sarcástica, enconada y atroz carcajada reventó en el Café. Todo el mundo parecía padecer de delirium tremens. Las pinturas eróticas que adornaban los techos lanzaron unoa clamores de alarma y los eunucos que servían los cafecitos y el peyotl se castraron right in front of the ladies. La multitud ululaba que Juan tenía que ser linchado, apedreado, machucado y pataleado. Se pedía su pericráneo y cabellera y un precio se fijó. Era ésta una multitud electrificada y presa de loca incertidumbre. Las damas se rasgaron sus vestidos y los hombres avanzaron furibundos hacia Juan y Margot. Rápidamente Juan tomó por el brazo a Margot y se la llevó hasta la puerta del Café. Iba a gritar algo cuando un botellazo le rompió la frente. ¡Qué lío se estaba formando! En medio del tumulto, entre insultos, empujones y carajazos, Juan y Margot pudieron escapar, no sin que a ésta última le escupieran encima. Su faz estaba torcida por el dolor, lucía franca como pétalo de lis, lúcida y penetrante como l’atavística Chu que persiguen los bufones; y, sin embargo, igualmente cruda y aguda y supersticiosa. Era como un alma mordida por la desolación. Si esta hembra parecía existir con cadenas alrededor de su cuello marfileño, si esta hembra personificaba la diosa desterrada, su carrera semi-legendaria y semi-histórica era cual un estigma cruento que aviva al desdichado cuando su sitar no es acogido en los círculos de los demás. Juan era Hefaistos, Urano y Sileno; más aún, era Venus, Juno, Urania y Deméter. Ah, Juan y Margot hicieron el amor esa noche al margen del sufrimiento. Sus cuerpos exhalaron un poder inmenso. Se amaron vorazmente. Se extirparon las heridas con grandiosos encuentros genitaloides. La curación que conoce todo ser viviente tuvo lugar en un cuarto viejo y colonial, cuyo balcón daba sobre una calle perfumada con melodías carnavalescas. Carnaval de calvarios, precedidos por luces de bengala y faisanes igniscentes, 3 horas idas para Juan y Margot. Carnaval inspirado en las cavernas de Kohistán y empinado en el pico más increíble del Himalaya. Danzas estrambóticas sin ensayo. Pura consonancia, pura euforia. Revolución. Y cuando los primeros rayos de luz cruzaron las rendijas de las ventans, los pies de Margot culebreados entre los de Juan, sus tetas húmedas, suculentas, montuosas, envueltas en las manos hirvientes de Juan, su cabellera india y azabache englobando los ojos azules del macho, l’habitación destellaba una fulgencia anormal y longeva capaz d’encandilar a millones de corazones carbonizados. Era iris, lucero, oriente salvador. Era el sacrificio voluntario para la redención de los climas borrosos. Y, cuando al fin se despertaron los incestuosos, en pleno mediodía, encontraron muchas palomas, muchas ocas, muchos caribúes, muchos gorriones, muchos peces cantantes, muchos perros de Terranova esperándolos en el florido balcón.
EL CÍCLOPE DE TINEH
“Juan le contó una vez a Margot que la personalidad se orientaba hacia 2 polos opuestos para alimentarse @ π 9 de fuerzas pujantes. Si él lograba conducirse en estado de completa lucidez cada vez que variaba su personalidad y demostraba que, en realidad, era varias personas diferentes, su existencia nunca terminaría. Mediante gustos, modales, ideas, sensaciones, cálculos y teorías contradictorias, él podía intuir la multiplicación de la individualidad. Lo que era difícil era mantener absoluta sinceridad hacia sí mismo y hacia cada una de las infinitas tensiones.”
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